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Ensamblajes tipo finger-joint en best wood SCHNEIDER
Calidad y duración mejoradas
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Con una geometría «a medida», LEUCO pudo mejorar la calidad de las fresas microensambles y aumentar la duración en la máquina de pase continuo de microensambles de best wood Schneider
Geometría nueva para la fresa tipo finger-joint
Markus Schindhelm (LEUCO)
Lukas Bärsauter (best wood Schneider)
El resultado de las optimizaciones fue un ensamblaje tipo finger-joint limpio con un mejor ajuste
La geometría de los ensamblajes tipo finger-joint se rediseñó para más posibilidades de ajuste.
Ferdinand Schneider, el gerente, está satisfecho
La producción de láminas microensambladas para la fabricación industrial de tableros alistonados y tableros de madera maciza debe llevarse a cabo con especial rapidez. Pero no se puede «pisar el pedal» sin límites: con una velocidad creciente, también crecen las fuentes de error exponencialmente. Por eso, best wood Schneider habló con LEUCO e hizo optimizar su fresa tipo finger-joint.
Con éxito: El intervalo de cambio de herramientas se alargó de dos veces por semana a una vez cada nueve semanas, cabe decir que con una calidad de fresado considerablemente mejor.
El grupo empresarial Schneider es un proveedor completo para la construcción moderna de viviendas de madera, afirma Lukas Bärsauter, responsable de gestión de calidad: «Producimos desde tableros alistonados hasta aislantes, especialmente elementos de techo de madera laminada BSH o BSP». La madera aserrada necesaria para ello proviene de cortes propios y se procesa a láminas microensambladas. Uno debe imaginar realmente cualquier cosa al microensamblar, comenta Markus Schindhelm, gerente de segmento de LEUCO, especialmente con una humedad de la madera fluctuante: «Una madera más seca se comporta de forma diferente al microensamblarla que una húmeda». Lo que podría provocar diferencias en las púas: «Así que debe observarse bien progresión de las puntas. Puesto que Schneider dispone de una perfiladora, las tablas están sujetas, pero cuentan con una cierta inclinación que debe evitarse. Por lo tanto, la progresión de las puntas puede ser distinta ya desde la entrada de la fresa hasta su salida. A su vez, esto puede provocar un juego base diferente y problemas con el ajuste».
Paso final: Mejora de la duración
«Cuando estábamos seguros de que la geometría funcionaba bien para Schneider y que tanto la calidad de las púas como el rendimiento de la instalación habían mejorado considerablemente, entonces debía darse otro paso más», resume Schindhelm: «Dijimos que de acuerdo, la ‘geometría Schneider’, que también hemos denominado así en nuestros dibujos, funciona, pero la duración aún no está a nuestro nivel habitual». Lo que, aparentemente, no supuso ningún problema para LEUCO: «Así que nos decidimos por equipar la herramienta con un recubrimiento y, con ello, pudimos mejorar la duración». Además, considerablemente, recuerda Schindhelm: «Al comienzo debíamos cambiar las fresas dos veces por semana. Ahora son varias semanas; creo que, actualmente, solo hace falta cambiar las fresas cada nueve semanas».
El artículo completo apareció en Holzkurier, edición 45/2020